Borrar la caché en Windows 11 no es precisamente una ciencia exacta, pero puede parecer una de esas tareas misteriosas que simplemente funciona o no. A veces, la gente nota que su sistema se ralentiza sin motivo aparente y se pregunta si es hora de reiniciarlo por completo o incluso reinstalarlo. De hecho, gran parte de esa ralentización se debe a la acumulación innecesaria de caché: esos archivos temporales, archivos de registro y demás basura que Windows guarda sin preguntar. Si tu equipo va lento o aparecen fallos extraños, borrar la caché podría ser la solución sin mayores complicaciones. Además, ayuda a liberar espacio, lo cual nunca viene mal.
Cómo borrar la caché en Windows 11
Básicamente, la idea es deshacerse de esos archivos temporales y recuperar espacio. Esto suele solucionar pequeños problemas y agilizar el proceso, especialmente si no se realiza un mantenimiento rutinario. Así es como lo he hecho: he trabajado con una configuración, quizá no tanto con otra, pero vale la pena intentarlo antes de pasar a cosas más complejas.
Cómo eliminar archivos temporales de la configuración
Primero, abre la app Configuración. Si eres como yo, simplemente pulsa Windows + Iel icono del engranaje en el menú Inicio. Desde ahí, ve a Sistema. En Almacenamiento, encontrarás una sección llamada Archivos Temporales. En algunas actualizaciones, puede que se llame “Archivos Temporales y Más” o algo similar, así que busca si no te resulta obvio.
- Una vez en Archivos Temporales, Windows analizará y mostrará todos los archivos basura: archivos en caché, restos de actualizaciones, cachés de miniaturas, etc. Puedes seleccionar lo que quieras eliminar. A veces, borrar todo aquí es perfectamente suficiente, pero asegúrate de no necesitar nada específico antes de hacer clic en “Eliminar archivos”.
Uso de Storage Sense para borrar automáticamente la caché
Otra forma bastante práctica es activar el Sensor de Almacenamiento. Lo encuentras en el mismo menú de Almacenamiento. Elimina automáticamente archivos temporales e incluso la caché de Outlook o OneDrive después de un tiempo determinado. Cuando funciona, te ahorra un paso y no tienes que preocuparte por ello. Simplemente actívalo, elige la frecuencia con la que quieres que se ejecute y olvídate. Aunque, sinceramente, revisarlo de vez en cuando no está mal. Es un poco raro que no esté activado por defecto, pero claro, Windows tiene que complicar las cosas más de lo debido.
Borrar la caché mediante la línea de comandos (avanzado, pero conviene saberlo)
Si se siente cómodo con los símbolos del sistema o PowerShell, también existen comandos para borrar la caché. Por ejemplo, abra PowerShell como administrador y ejecute:
Start-Process "cleanmgr" -ArgumentList "/sageset:1" -Verb runAs
Esto abre el Liberador de espacio en disco con opciones que puedes seleccionar, incluyendo archivos de caché. A continuación, ejecuta:
cleanmgr /sagerun:1
Eliminará lo que seleccionaste anteriormente. No es necesario para la mayoría, pero es útil si prefieres usar scripts o quieres automatizar tareas fuera de la interfaz de Windows.
En ocasiones, los problemas de caché se relacionan con aplicaciones o navegadores específicos. Borrar la caché del navegador o de aplicaciones específicas (como Spotify o Discord) es otra historia, pero lo simplificaré: para la caché general del sistema, estos pasos son puntos de partida legítimos.
En mi experiencia, ejecutar estos pasos de limpieza puede mejorar la velocidad del equipo. A veces es necesario reiniciarlo después para notar la diferencia, pero en general, es un buen primer intento antes de realizar correcciones más invasivas.
Consejos para borrar la caché en Windows 11
- Establezca un recordatorio para la limpieza regular de caché, tal vez mensual o quincenalmente si tiene una máquina desordenada.
- Si te interesa la automatización, habilita Storage Sense: se ejecutará silenciosamente en segundo plano.
- Revisa los archivos que ocupan más espacio en Almacenamiento para ver si hay alguno que puedas eliminar.
- No olvides hacer una copia de seguridad de todo lo que sea vital antes de limpiar, por si acaso.
- Mantener Windows actualizado ayuda porque a veces Microsoft mejora las funciones de administración de caché sin que usted se dé cuenta.
Preguntas frecuentes
¿Qué es exactamente el caché?
La caché es básicamente un almacenamiento temporal que guarda fragmentos de datos que el sistema usa con frecuencia, evitando así tener que recuperarlos o recalcularlos constantemente. Si bien acelera el proceso, con el tiempo esos archivos se vuelven un desorden.
¿Borrar el caché ralentizará mis aplicaciones o el sistema?
Generalmente sí, temporalmente. Las aplicaciones reconstruyen sus cachés, lo que puede causar un pequeño retraso al reabrirse, pero en general, es una compensación rápida por más espacio y menos desorden.
¿Con qué frecuencia debo borrar la caché?
Honestamente, una vez al mes parece razonable a menos que notes que tu PC se siente lenta o se queda sin espacio en disco más rápido de lo habitual.
¿Es riesgoso borrar la caché?
En realidad no. Elimina archivos temporales, que no son críticos, pero si estás eliminando cachés del navegador o de aplicaciones, ten en cuenta que podrías perder datos guardados o el estado de inicio de sesión.
¿Puedo automatizar todo esto?
Sí, habilitar Storage Sense o usar scripts con PowerShell puede hacer el trabajo sucio por ti. Básicamente, simplemente lo activo para no olvidarlo.
Resumen
- Abra Configuración, vaya a Sistema, luego Almacenamiento.
- Haga clic en Archivos temporales, seleccione lo que desea eliminar y confirme.
- Activa Storage Sense si lo quieres automático.
- Considere una limpieza de disco o una línea de comandos si las cosas se ponen difíciles.
Resumen
Borrar la caché no es la solución definitiva, pero es una forma bastante rápida de eliminar el desorden que podría ralentizar Windows 11. Es como darle un pequeño repaso a tu PC: simple, efectivo y que vale la pena hacer de vez en cuando. A veces, con solo un par de estos pasos se puede revitalizar un equipo lento, y sin duda es mejor que esperar grandes actualizaciones del sistema o las llamadas “mejoras de rendimiento” que tardan una eternidad en aplicarse.
Ojalá esto te ayude a completar un paso más tu rutina de mantenimiento.¡Crucemos los dedos para que te sea útil!