Cómo configurar un servidor DNS personalizado en Android

Así que, cada vez que introduces una URL en la barra de direcciones de tu navegador, tu dispositivo usa servidores DNS para traducirla a una dirección IP. Es como la guía telefónica de internet. Normalmente, las consultas DNS son bastante rápidas, pero el problema es que, a veces, esos servidores DNS, sobre todo los que proporciona tu proveedor de internet, pueden ser inestables o simplemente lentos. Cuando esto ocurre, aparecen errores como “error en la búsqueda DNS” o “el servidor DNS no responde”, lo cual puede ser muy frustrante porque parece que tu internet no funciona cuando en realidad es solo el DNS el que falla.

Una solución fácil, que muchos no se molestan en implementar, es cambiar estos servidores DNS predeterminados por otros más rápidos, fiables y, a menudo, más privados. Esta guía muestra cómo añadir un servidor DNS personalizado en Android, lo cual es muy útil porque puede mejorar la velocidad de navegación, la seguridad e incluso evitar algunas restricciones geográficas si se usan los correctos. Además, la mayoría de estas opciones de DNS públicos son gratuitas. Tener un conjunto de servidores DNS preferidos puede ser crucial, especialmente si el DNS de tu proveedor de internet es deficiente o poco fiable. Créeme, puede hacer que esa página que tarda en cargar cargue mucho más rápido.

Cómo solucionar problemas de DNS y agregar un servidor DNS personalizado en Android

Método 1: Configurar manualmente un DNS personalizado en Android

Hacerlo manualmente es algo clásico, pero efectivo. Esto ayuda especialmente si te aparece una ventana emergente de error de DNS o si notas que los sitios web cargan con una lentitud inusual. Funciona porque le indicas a tu teléfono explícitamente qué servidores DNS usar, ignorando los que te envía tu proveedor de internet. El resultado debería ser una experiencia de navegación un poco más ágil y menos errores de DNS molestos.

  1. Abre la aplicación Ajustes. Sí, el icono del engranaje, que suele estar en un lugar fácil de localizar.
  2. Toque Red e Internet (o, a veces, solo Conexiones, dependiendo de la versión de Android).
  3. Seleccione Wi-Fi, luego busque su red y manténgala presionada o tóquela para que aparezcan las opciones.
  4. Selecciona “Modificar red”. Quizás tengas que marcar ” Mostrar opciones avanzadas” si están ocultas; aquí es donde Android te obliga a investigar un poco.
  5. Ahí abajo, busca el menú desplegable de configuración de IP y cámbialo de DHCP a Estático. Sí, es un movimiento un poco engañoso, pero es la forma de acceder a la configuración de DNS.
  6. Desplázate un poco hacia abajo para encontrar DNS 1 y DNS 2. Aquí es donde ingresas tus servidores DNS preferidos. Por ejemplo, Google DNS es 8.8.8.8 y 8.8.4.4. OpenDNS es 1.1.1.1 y 1.0.0.1. Adguard DNS es otra opción; consulta su sitio web para obtener más información: Adguard DNS.

  7. Una vez que hayas completado ambos campos, pulsa ” Guardar”. Listo, tu teléfono ahora usará estos servidores DNS en lugar de los predeterminados.

Sí, es un poco raro tener que cambiar a una IP estática solo para cambiar el DNS, pero Android no siempre es el sistema operativo más atractivo en ese sentido. A veces, en ciertos dispositivos, esto causa algún que otro contratiempo; por ejemplo, no se conecta hasta que desactivas y activas el Wi-Fi. Pero en la mayoría de los casos, este simple cambio acelera notablemente la carga de los sitios web y estabiliza las conexiones, sobre todo si el DNS predeterminado del proveedor de internet es inestable.

Método 2: Utilizar una aplicación de cambio de DNS

Otra opción menos manual, pero bastante sencilla, es usar una aplicación para cambiar DNS. Hay muchísimas en Google Play Store, la mayoría gratuitas. Estas aplicaciones no suelen requerir mucha configuración: solo tienes que abrirlas, seleccionar un servidor DNS de una lista y pulsar “Ir”.Es como un botón mágico que cambia tus DNS sin tener que entrar en la configuración.

La razón por la que esto funciona es que estas aplicaciones básicamente modifican la configuración de red internamente, lo que facilita la tarea a quienes no quieren entrar en detalles.¿La desventaja? A veces, estas aplicaciones no son tan flexibles y no todas funcionan a la perfección en todos los dispositivos. Aun así, en una configuración funcionó perfectamente, y en otra me dio un pequeño dolor de cabeza, así que la experiencia puede variar.

Algunas opciones populares incluyen DNS Changer o DNS Changer App. Normalmente, solo tienes que abrirlo, elegir el DNS que prefieras (Google, Cloudflare, OpenDNS, etc.) y se aplica automáticamente. Se acabaron las configuraciones manuales y las complicaciones.

Ten en cuenta que estas aplicaciones podrían necesitar permisos para modificar la configuración de red, así que revisa tus permisos. Si quieres volver a la configuración predeterminada, simplemente desactiva la aplicación o cambia el DNS manualmente.

Si estás cansado de esperar a que el Wi-Fi se vuelva más rápido o estable por arte de magia, o simplemente quieres tener más control sobre cómo navegas, jugar con tu DNS es un buen comienzo. Porque, sinceramente, Windows a veces lo hace más difícil de lo necesario (Android no es mucho mejor), pero al menos hay soluciones alternativas.