Usar la app Atajos del iPhone para convertir vídeos en GIF es bastante práctico, pero no siempre es tan sencillo como esperarías. A veces, el proceso resulta complicado o el GIF no se guarda correctamente. Si has probado el atajo integrado y te has topado con un problema, o si simplemente quieres un poco más de control, hay algunos trucos y pasos adicionales que pueden marcar la diferencia. Esta guía, bastante rápida, te muestra el método nativo, además de algunos ajustes para automatizar o mejorar el flujo de trabajo, para que puedas guardar los GIF directamente en la app Fotos sin complicarte demasiado.
Cómo convertir un vídeo a GIF en iPhone
Uso de la aplicación Atajos para conversión básica
Este método aprovecha la aplicación nativa Atajos, que es bastante sencilla, pero puede ser algo limitada. Cuando funciona, es rápido: selecciona tu video, recórtalo y guarda el GIF en Fotos. Sin embargo, a veces, el acceso directo no se muestra correctamente o el GIF no se guarda donde quieres. Es un buen primer intento, sobre todo si no quieres instalar nada adicional. Ten en cuenta que, en algunas configuraciones, el acceso directo puede fallar la primera vez o la selección de videos puede no funcionar a menos que los permisos estén configurados correctamente.
- Abre la app Atajos en tu iPhone. Si no está instalada, descárgala del App Store.
- Ve a la pestaña Galería en la esquina inferior derecha y usa el buscador para encontrar “Video a GIF”.Cuando lo encuentres, púlsalo para previsualizarlo.
- Toque el botón Agregar acceso directo para agregarlo a su biblioteca.
- Cambie a la pestaña Mis accesos directos en la parte inferior izquierda para verla listada allí.
- Toque el acceso directo Vídeo a GIF para ejecutarlo.
- El acceso directo escanea tus videos. Selecciona el que quieras; comprueba que sea el clip correcto o elige uno diferente si es necesario. A veces, necesita permiso para acceder a tus fotos, así que concédelo si se te solicita.
- Puedes mover las chevrones a ambos lados del control deslizante para recortar el videoclip. No es muy preciso, pero sí suficiente para eliminar lo superfluo.
- Pulsa ” Guardar” en la esquina superior derecha; verás una vista previa del GIF. Si se ve bien, pulsa ” Compartir” y luego “Guardar imagen” para subirlo a Fotos.
Cómo automatizar el proceso de ahorro
Si estás cansado de guardar manualmente cada GIF después de cada ejecución, aquí tienes un truco: modifica el acceso directo para que se guarde automáticamente en Fotos cada vez. Así, no tendrás que acordarte de compartir y guardar. Es muy práctico, sobre todo si creas varios GIF seguidos o quieres optimizar el flujo de trabajo. Además, reduce los olvidos o la posibilidad de perder el GIF después de previsualizarlo.
- Abra la aplicación Atajos y busque el atajo de Video a GIF que agregó anteriormente.
- Toque el ícono de tres puntos en el acceso directo para editar.
- Una vez en el modo de edición, presione Agregar acción y busque Guardar en álbum de fotos.
- Arrastre y coloque la acción “Guardar en álbum de fotos” después de crear el GIF. Asegúrese de que esté configurada para guardar en su álbum preferido, como “Recientes” o uno personalizado.
- Pulse Listo en la parte superior derecha para guardar los cambios.
Esta modificación garantiza que los GIF se transfieran directamente a tus Fotos sin necesidad de tocarlos. Funciona mejor al procesar varios videos y reduce el riesgo de perderlos accidentalmente.
Y un aviso: si el acceso directo parece un poco básico o se bloquea a veces, existen aplicaciones de terceros, como GIF Maker de Giphy o ImgPlay, que ofrecen más opciones y un mejor control. Pero para conversiones rápidas y sencillas, el método nativo funciona…en su mayoría.
Resumen
- Utilice la aplicación Atajos para convertir videos a GIF: es simple pero a veces presenta errores.
- Ajuste los accesos directos para automatizar el guardado si hace esto con frecuencia.
- Tenga en cuenta los permisos y los recortes para obtener mejores resultados.
- Explora aplicaciones de terceros para obtener funciones de edición más avanzadas.
Resumen
Resulta que los métodos nativos funcionan bien, pero no son perfectos. Si el acceso directo no funciona o quieres más personalización, probar una aplicación de terceros podría valer la pena. De lo contrario, simplemente ajustar el acceso directo integrado para que se guarde automáticamente puede ahorrarte tiempo y frustraciones. Con suerte, esto le ahorrará algunas horas a alguien, porque, claro, el ecosistema de Apple no siempre es el más intuitivo en este aspecto. Pero si consigue que una actualización funcione, es un triunfo.