Crear una partición en Windows 11 es bastante sencillo, pero existen algunas peculiaridades que podrías encontrarte, especialmente si planeas dividir una unidad que ya está llena o si estás modificando la unidad del sistema. Es una de esas tareas que parecen simples en teoría, pero a veces Windows no colabora, por ejemplo, al negarse a reducir un volumen debido a los archivos de paginación o al uso de espacio por parte del sistema. Aun así, saber cómo hacerlo correctamente puede ahorrarte muchos dolores de cabeza más adelante, sobre todo al gestionar varios proyectos o al configurar almacenamiento separado para el trabajo y los archivos personales.
Cómo solucionar problemas de particionamiento en Windows 11
Abre la administración de discos y afronta las limitaciones cada vez menores.
Primero, abre Administración de discos haciendo Windows + Xclic en Administración de discos. Esta es la herramienta principal para gestionar tus discos. A veces, no podrás reducir el tamaño de un volumen tanto como quisieras porque Windows está bloqueando el espacio, generalmente debido a archivos del sistema, archivos de paginación o copias de seguridad. Si esto ocurre, comprueba si Windows ha reservado espacio para archivos del sistema o si hay datos que no se pueden mover asociados a esa partición. En algunos casos, puedes deshabilitar estas funciones temporalmente, pero eso puede generar otros problemas.
Método 1: Utilizar herramientas de línea de comandos para eliminar archivos innecesarios
Claro, Windows lo complica más de lo necesario. Puedes intentar usar PowerShell o Símbolo del sistema con privilegios de administrador para eliminar archivos innecesarios, lo que podría liberar el espacio necesario para reducir el tamaño del disco. Por ejemplo, ejecutar cleanmgrcomandos diskpartpuede ser útil. En particular, abrir Símbolo del sistema como administrador y escribir `ls -l` diskpartte permite ver tus discos y podría revelar archivos que no se pueden mover. A veces, ejecutar `ls defrag-l` en la unidad también ayuda, aunque no siempre es la solución definitiva.
Método 2: Deshabilitar temporalmente los archivos del sistema y las copias de seguridad de instantáneas
Para obtener más margen de reducción, es posible que deba deshabilitar funciones del sistema que Windows utiliza para mantener su estabilidad. Por ejemplo, desactive temporalmente el Archivo de paginación:
- Ve a Ajustes > Sistema > Acerca de > Ajustes avanzados del sistema
- En Rendimiento, haga clic en Configuración.
- Navegue hasta la pestaña Avanzado y haga clic en Cambiar en Memoria virtual.
- Desactive la opción Gestionar automáticamente el tamaño del archivo de paginación para todas las unidades y configure Archivo de paginación en Ninguno temporalmente.
- Haz clic en Aceptar y reinicia. Una vez hecho esto, intenta reducir de nuevo.
Esto podría liberar espacio para permitir una reducción mayor. Eso sí, no olvides volver a activar el archivo de paginación después, o Windows podría dar problemas.
Método 3: Utilizar herramientas de partición de terceros
Si todo lo demás falla, una herramienta de terceros como MiniTool Partition Wizard o EaseUS Partition Master puede encargarse del trabajo pesado. Suelen ser más eficaces para mover y redimensionar particiones con las que la herramienta predeterminada de Windows tiene dificultades. Estas aplicaciones a menudo pueden desfragmentar el disco y mover archivos que no se pueden mover, algo que Windows no puede hacer. Recuerda: siempre haz una copia de seguridad de tus datos antes de intentar esto; estas herramientas son fiables, pero nada supera una copia de seguridad rápida antes de modificar las particiones del disco.
Recuerda los riesgos
Particionar el disco no es *peligroso* en sí mismo, pero modificar la unidad del sistema o la partición principal siempre conlleva riesgos. Los apagones inesperados o las pérdidas de energía pueden dañar los datos, así que guarda tu trabajo, haz una copia de seguridad primero y tómate tu tiempo. En algunos equipos, estos ajustes podrían no funcionar de inmediato; es posible que necesites reiniciar un par de veces o probar diferentes métodos para que todo funcione. Es un poco extraño, pero a veces Windows simplemente se niega a liberar espacio hasta que esté listo o hasta que desactives ciertas funciones temporalmente.
Una vez que logres reducir el tamaño del disco lo suficiente, crear nuevas particiones es tan sencillo como seguir el asistente y asignar las letras de unidad como siempre. Como dije, en teoría es simple, pero son esos pequeños inconvenientes los que lo hacen más interesante.
Resumen
- Abra Administración de discos mediante Windows + X.
- Si la reducción del tamaño de la unidad es limitada, deshabilite los archivos de paginación, las copias de sombra o desfragmente el disco.
- Utilice los comandos de diskpart o herramientas de terceros si Windows se niega a reducir el tamaño lo suficiente.
- Siempre realiza una copia de seguridad de tus datos primero, porque, claro, las cosas pueden salir mal.
Resumen
Particionar discos en Windows 11 puede ser muy útil una vez superados los obstáculos iniciales, sobre todo cuando Windows no libera espacio fácilmente. Estos métodos no siempre funcionan a la primera, pero suelen acercarte a la partición ideal. Se trata principalmente de limpiar el disco, desactivar temporalmente ciertas funciones o usar una buena aplicación de terceros cuando sea necesario. En definitiva, un poco de paciencia y experimentación son clave. Ojalá esto le sirva a alguien para recuperar un disco duro problemático.