Entonces, desactivar el overclocking en Windows 10 puede ser de gran ayuda si tu máquina se comporta de forma inestable (se bloquea, se congela de forma extraña o simplemente va lenta).Por lo general, implica acceder a la configuración de la BIOS o UEFI y desactivar esos ajustes que mejoran el rendimiento. Por supuesto, depende de tu configuración, pero en la mayoría de los casos, restablecer los valores predeterminados hace que tu sistema sea más fiable. Ten en cuenta que, si estás haciendo overclocking, tu hardware funciona más rápido de lo que fue diseñado, lo cual suena bien, pero también puede afectar a la estabilidad después de un tiempo. Desactivarlo restablece las velocidades de fábrica, con la esperanza de solucionar esos problemas. Además, es buena idea consultar el manual de tu placa base o las guías en línea para obtener instrucciones específicas, ya que los nombres y las ubicaciones de los menús difieren mucho de un fabricante a otro. A veces, una actualización de la BIOS puede ayudar con los problemas de estabilidad, porque, por supuesto, Windows tiene que hacerlo más difícil de lo necesario. Ahora, te mostramos cómo hacerlo sin convertirlo en un proyecto en toda regla, o correr el riesgo de dañar tu máquina.
Cómo desactivar el overclocking en Windows 10
Acceder al BIOS o UEFI durante el inicio
– Reinicia tu PC. Presta atención al arrancar: justo después de presionar el botón de encendido, verás una pantalla de inicio o un mensaje que te indicará qué tecla presionar para acceder a la configuración del BIOS/UEFI. Normalmente, son F2, F10, Supr o Esc. Si no aparece nada, intenta presionar Delo F2rápidamente mientras el sistema arranca. A veces, se necesitan un par de intentos, especialmente en equipos nuevos, ya que Windows es muy cauteloso con los arranques rápidos.
Ingresar a la configuración del BIOS/UEFI
Una vez dentro, usa el teclado (no suele ser compatible con el ratón).Navega con cuidado; no siempre es intuitivo, ya que cada marca de placa base tiene su propio diseño de menú. Busca principalmente las pestañas ” Avanzado”, “Overclocking” o “Rendimiento”. En algunas configuraciones, verás un menú llamado “Configuración de CPU” o similar.
Encuentra opciones de overclocking
El objetivo es localizar parámetros como la relación de CPU, el multiplicador o la frecuencia. Muchas veces, la configuración de overclocking se encuentra en opciones como ” Configuración avanzada de frecuencia ” u ” Overclocking y voltaje “.Si ves algo como Intel Turbo Boost
o AMD Precision Boost
, a veces pueden aumentar la velocidad automáticamente; es mejor desactivarlos o restablecerlos a los valores predeterminados.
Deshabilitar o restablecer la configuración de overclocking
Restablezca todas las opciones relacionadas con el overclocking a sus valores predeterminados. Por ejemplo, cambie el Multiplicador de CPU a automático o a un valor predeterminado. Si hay un interruptor para Overclock o Habilitar Overclocking, desactívelo. A veces, basta con seleccionar la opción ” Restablecer valores predeterminados” ; esto suele ser suficiente, pero revise la configuración específica.
Guardar cambios y reiniciar
Busca una opción como “Guardar y salir” o simplemente pulsa F10. Confirma el guardado si se te pide y deja que tu PC se reinicie. Después, tu sistema debería arrancar a la velocidad original. En algunas configuraciones, estos cambios pueden tardar un poco; ten paciencia. Un pequeño detalle: en algunos sistemas, después de desactivar el overclocking, la situación puede seguir siendo un poco extraña hasta que reinicies por completo o incluso borres la CMOS si la situación no va bien. No siempre es necesario, pero a veces es necesario reiniciar por completo, especialmente si se guardaron perfiles de overclock anteriores en la BIOS.
Consejos para desactivar el overclocking en Windows 10
- Tome una captura de pantalla o anote la configuración actual del BIOS, en caso de que quiera revertirla más tarde.
- Consulte el manual de su placa base o el sitio del fabricante para conocer los nombres exactos de los menús; los nombres pueden ser un poco diferentes según su equipo.
- Si los problemas persisten, considere actualizar el firmware de su BIOS. A veces, las versiones más recientes de la BIOS soportan mejor el overclocking o son más estables.
- Si no estás seguro, no dudes en buscar ayuda en línea o de alguien con más conocimientos técnicos. Modificar la BIOS no siempre es sencillo, y no querrás dañar tu sistema.
- Una vez que hayas terminado, vigila la temperatura y la estabilidad de tu sistema; el estrés adicional aún puede provocar un comportamiento extraño, incluso a las velocidades estándar.
Preguntas frecuentes
¿Qué es el overclocking?
Básicamente, se trata de forzar la CPU o GPU más allá de sus especificaciones oficiales para obtener un rendimiento extra. Suena bien, pero también es arriesgado: puede provocar más calor, fallos o incluso daños en el hardware si no se hace con cuidado.
¿Por qué apagarlo?
Desactivar el overclocking restaura la estabilidad y la longevidad del sistema. Si sufres fallos, sobrecalentamiento o simplemente quieres reducir el desgaste, volver a la velocidad original es de gran ayuda.
¿Puedo volver a encenderlo más tarde?
Sí, la mayoría de las configuraciones de BIOS te permiten reactivar el overclocking cuando quieras. Simplemente revisa la configuración y vuelve a activar los interruptores.
¿Desactivar el overclocking hará que los juegos sean más lentos?
Quizás un poco, pero en general, suele ser más estable. Si un juego se bloquea o se traba, la configuración predeterminada puede mejorar la experiencia.
¿Es seguro desactivar el overclocking?
Por supuesto, volver a las velocidades predeterminadas generalmente es seguro, especialmente si la estabilidad o la vida útil del hardware son preocupaciones.
Resumen
- Reinicia tu computadora
- Ingrese a la configuración del BIOS/UEFI (esté atento a la sugerencia en la pantalla de inicio)
- Navegar a los menús de overclocking o rendimiento
- Restablecer o deshabilitar las opciones de overclocking
- Guardar y reiniciar
Resumen
Sinceramente, desactivar el overclocking no es complicado una vez que te familiarizas con la BIOS. Es un alivio, la verdad: menos calor, menos fallos y el hardware funcionando a la velocidad prevista. Solo ten cuidado y recuerda que los menús de la BIOS pueden ser complicados, así que no dudes en buscar información o consultar foros online para tu marca de placa base. Normalmente, el proceso no es tan intimidante como parece. Cruzo los dedos para que esto ayude a alguien a estabilizar su sistema sin problemas; funcionó con varias máquinas, así que quizá también te sirva.