Cómo entrar en modo seguro en Windows 10: guía completa paso a paso

El Modo Seguro en Windows 10 es como un salvavidas si tu sistema funciona de forma irregular. Reduce Windows a un modo básico, comenzando solo con los controladores y servicios esenciales, eliminando todos esos elementos superfluos que pueden causar conflictos. Esto facilita la solución de problemas persistentes, como fallos persistentes, problemas con los controladores o malware que se resiste a desaparecer. A veces, Windows simplemente no quiere iniciarse con normalidad, y activar el Modo Seguro es prácticamente la forma más rápida de acceder a un estado de diagnóstico sin complicaciones. El problema es que acceder a él no siempre es sencillo, sobre todo si el arranque normal se bloquea. Pero una vez que funciona, puedes desinstalar controladores problemáticos, ejecutar análisis de malware o restablecer la configuración sin problemas. Este es un proceso típico, y estos pasos funcionan sorprendentemente bien, incluso si a veces Windows se muestra particularmente persistente. Ten en cuenta que es posible que tengas que probar un par de métodos diferentes según tu configuración, sobre todo si tu PC se niega a iniciar Windows. A veces, tendrás que usar una unidad de recuperación u opciones de arranque especiales, pero en general, es bastante manejable una vez que le coges el truco. Y no, no es permanente: simplemente reinicias y Windows arranca normalmente. Sin embargo, en algunas configuraciones, al primer intento, podría fallar o aparecer una pantalla extraña, así que ten paciencia y un poco de prueba y error.

Cómo arreglar Windows 10 en modo seguro

Entrar al modo seguro puede salvar el día cuando su PC falla o funciona mal.

Cuando Windows 10 no arranca correctamente o se bloquea constantemente, el Modo Seguro puede ser la solución. Carga solo los archivos y controladores principales del sistema, así que si una actualización o un controlador reciente causa el bloqueo, el Modo Seguro te permite desactivarlo o desinstalarlo. A veces, Windows ni siquiera arranca normalmente, así que tienes que ser un poco ingenioso, como arrancar en modo de recuperación mediante un USB o usar las opciones de inicio avanzadas desde la pantalla de inicio de sesión. El objetivo es eliminar la causa del problema sin que Windows te lo impida.

Método 1: Usar la configuración (si Windows aún se inicia)

  • Haga clic en Inicio y luego vaya a Configuración (el ícono del engranaje).
  • Haga clic en Actualizar y seguridad y luego en Recuperación.
  • En Inicio avanzado, haga clic en Reiniciar ahora.
  • Una vez que su PC se reinicie en el menú, seleccione Solucionar problemas.
  • Desde allí, vaya a Opciones avanzadas.
  • Haga clic en Configuración de inicio y luego presione Reiniciar.
  • De regreso al menú, presione 4o F4para elegir Modo seguro, o 5para Modo seguro con funciones de red si necesita acceso a Internet.

Esta ruta suele ser la más sencilla si Windows aún puede arrancar con alguna versión del sistema operativo. Pero si tu sistema está inactivo o bloqueado, no te preocupes: hay otros trucos.

Método 2: Forzar el modo seguro al arrancar (si Windows no se inicia)

  • Interrumpa el proceso de arranque normal tres veces seguidas (apague el PC en cuanto Windows empiece a cargarse, reinicie y repita el proceso).De esta forma, Windows debería arrancar en Reparación automática.
  • Una vez en la pantalla Reparación automática, seleccione Opciones avanzadas.
  • Vaya a Solucionar problemas > Opciones avanzadas > Configuración de inicio.
  • Haga clic en Reiniciar y luego seleccione las opciones de Modo seguro presionando las teclas numéricas apropiadas.

A veces, Windows entra directamente en modo de recuperación, y podrías necesitar acceder al símbolo del sistema o usar una memoria USB de arranque si todo lo demás falla. Porque, claro, Windows tiene que complicarlo más de lo necesario.

Otros consejos: Uso de una unidad de recuperación de Windows

Si ninguna de las opciones anteriores funciona porque Windows no responde, crear una unidad de recuperación o un USB de arranque con medios de Windows puede ser útil. Arranque desde esa unidad y seleccione la opción ” Reparar el equipo”. En las opciones de reparación, es prácticamente lo mismo: Solucionar problemas > Opciones avanzadas > Configuración de inicio > Reiniciar y, a continuación, seleccione “Modo seguro”.Es un poco indirecto, pero funciona.

Y sí, este proceso a veces resulta engorroso, sobre todo si tu PC se niega a cooperar la primera vez. En algunas configuraciones, puede que necesites varios intentos, o quizá tengas que usar un par de discos de recuperación o usar la línea de comandos. Pero con un poco de paciencia, suele aparecer el Modo Seguro y entonces puedes hacer lo que quieras: desinstalar, actualizar, eliminar malware o realizar algunos ajustes del sistema.