Revisar el rendimiento de tu PC en Windows 10 puede parecer sencillo, pero a veces resulta un poco molesto descubrir qué sucede en segundo plano. Si tu sistema se siente lento o simplemente quieres una forma rápida de comprobar si todo funciona correctamente, existen herramientas integradas que lo hacen sin necesidad de software de terceros. Usar el Administrador de Tareas y el Monitor de Rendimiento puede ofrecerte una visión bastante clara del uso de recursos (CPU, memoria, disco, red) y ayudarte a identificar la causa del lag o la ralentización. A veces basta con cerrar algunas aplicaciones que consumen demasiado o actualizar controladores, pero saber qué sucede en segundo plano lo facilita. Además, estas herramientas pueden ahorrarte horas de conjeturas, sobre todo si tu PC empieza a comportarse de forma extraña sin motivo.
Cómo comprobar el rendimiento de tu PC en Windows 10
Utilice el Administrador de tareas para obtener una vista rápida
Si hay algo que casi siempre está disponible, es el Administrador de Tareas. Al presionarlo Ctrl + Shift + Esc, se abre casi al instante. En algunas configuraciones, puede abrirse en la vista simplificada, así que haz clic en Más detalles en la parte inferior si es necesario. La pestaña Rendimiento es lo que buscas. Aquí verás gráficos en tiempo real de CPU, memoria, disco y red. Es como el tablero de tu auto: conoces qué es normal y, si alguna métrica se dispara repentinamente, vale la pena investigarla. En algunos equipos, puede presentar algunos errores o una actualización lenta, pero en general, es lo suficientemente confiable para una comprobación rápida. Recuerda que puedes hacer clic derecho en los gráficos de recursos para obtener información más detallada o estadísticas específicas, lo cual es útil si estás solucionando problemas.
Profundice con el Monitor de rendimiento
Para obtener datos más granulares, el Monitor de Rendimiento es una joya escondida. Se inicia presionando Windows + R, escribiendo perfmon
y presionando Intro. Al principio, es un poco difícil acostumbrarse, pero proporciona gráficos y registros detallados sobre el estado del sistema. Puedes ir a Herramientas de Monitoreo > Monitor de Rendimiento en el panel izquierdo para ver datos en tiempo real. O bien, puedes crear conjuntos de recopiladores de datos personalizados si quieres rastrear hardware o software específico a lo largo del tiempo; algo así como una “caja negra” manual para tu PC. Algunos días, esta herramienta puede parecer inactiva o tardar un segundo en cargarse, especialmente en hardware antiguo; aun así, es muy útil para detectar ralentizaciones o patrones extraños.
Consulta rápida de recursos con descripción general de los recursos
En el Monitor de Rendimiento, si hace clic en Resumen de Recursos, obtendrá una visión general de lo que está consumiendo los recursos de su sistema, lo cual es muy útil si nota lag después de abrir varias pestañas o programas. Es simple: el alto uso de CPU o disco suele ser la causa, pero a veces se trata simplemente de un proceso malintencionado. Si observa algo inusual, como una actividad de disco muy alta, considere abrir el Administrador de Tareas y finalizar ese proceso o investigar más a fondo el problema. Tenga en cuenta que algunos procesos en segundo plano son normales, pero en algunas configuraciones, un proceso descontrolado puede ralentizar el sistema.
Revisar los diagnósticos del sistema y los conjuntos de recopiladores de datos
Si desea obtener información aún más detallada, el Diagnóstico del Sistema del Monitor de Rendimiento puede brindar información sobre posibles problemas, como errores de hardware o conflictos de controladores. En Conjuntos de Recopiladores de Datos > Sistema, puede ejecutar diagnósticos que analizan el rendimiento de su sistema durante un período. Configurarlo es un poco engorroso, pero a veces detecta errores que se pasan por alto en comprobaciones casuales. Sinceramente, es mejor usarlo cuando se llega a un punto muerto después de otros intentos de resolución de problemas. En una configuración, funcionó sin problemas; en otra, es un poco lento, pero vale la pena intentarlo si nada más revela la causa raíz.
Después de hacer todo esto, comprenderás con claridad si tu PC simplemente está teniendo un mal día o si hay un problema real que necesita solución. Honestamente, simplemente vigilar los picos de recursos de vez en cuando ayuda a detectar problemas a tiempo, como si fuera un chequeo del estado de tu equipo. Recuerda que Windows tiene muchas herramientas, así que no necesitas que tu sistema se sature de archivos innecesarios a menos que quieras un análisis más detallado.
Consejos para supervisar el rendimiento sin frustración
- Mantén el Administrador de Tareas listo para echar un vistazo rápido. Es rápido y puedes ver mucho en segundos.
- Hazte revisiones regulares, al menos una vez al mes, para que no surjan problemas de repente. Es como ir al médico para una revisión rápida.
- Cierra las aplicaciones que no necesites: menos es más cuando se trata del consumo de recursos.
- Actualice sus controladores: Windows Update o los sitios web del fabricante pueden ayudar, y los controladores obsoletos suelen ser el cuello de botella.
- Utilice las herramientas propias de Windows: suelen ser suficientes, a menos que esté realizando una resolución de problemas profunda.
Preguntas frecuentes
¿Con qué frecuencia se debe comprobar el rendimiento?
Idealmente, mensualmente, sobre todo si las cosas empiezan a ir lentas o con retraso. Es mejor detectar los problemas a tiempo, antes de que se descontrolen.
¿Qué puedo hacer si el uso de la CPU es constantemente alto?
Revisa el Administrador de Tareas para ver si hay procesos fuera de control; podrías finalizar una tarea o deshabilitar aplicaciones de inicio innecesarias. Actualizar el hardware (como agregar más RAM o cambiar a un SSD) también puede ser útil a largo plazo.
¿Es seguro utilizar el Monitor de rendimiento y el Administrador de tareas?
Sí, están integrados en Windows y diseñados para solucionar problemas. No te preocupes por causar daños, pero siempre ten cuidado con lo que cambias según lo que encuentres.
¿Puedo monitorear el rendimiento del sistema sin el Administrador de tareas?
Por supuesto. El Monitor de Rendimiento es la mejor opción para obtener datos detallados, especialmente si el Administrador de Tareas parece limitado o si desea realizar un seguimiento a lo largo del tiempo.
Resumen
- Abra el Administrador de tareas, vaya a la pestaña Rendimiento.
- Utilice el Monitor de rendimiento para obtener información más detallada.
- Verifique periódicamente el uso de recursos.
- Revise los diagnósticos si los problemas persisten.
- Mantenga los controladores actualizados y cierre las aplicaciones innecesarias.
Resumen
Sinceramente, es sorprendente lo mucho que se puede aprender con solo explorar las herramientas integradas. Ya sea por una ralentización repentina o simplemente por anticiparse a posibles problemas, estos pasos ofrecen mucha información. A veces, con solo finalizar un proceso que consume muchos recursos o actualizar los controladores se soluciona el problema, sin necesidad de medidas drásticas. Algunos días, el Monitor de Rendimiento puede tener problemas de latencia o ser un poco excesivo, pero está ahí cuando lo necesitas. En general, controlar el estado de tu PC no es tan difícil y podría ahorrarte mucha frustración en el futuro. Ojalá esto ayude a evitar la sensación de “¿por qué mi PC va tan lento?”.