Los problemas con los altavoces en Windows pueden ser un verdadero fastidio, sobre todo si dependes de tu PC para reuniones, juegos o simplemente para escuchar música. A veces, el sonido se silencia accidentalmente o algún fallo en los controladores causa problemas. Si los altavoces dejan de funcionar de repente, vale la pena seguir algunos pasos para solucionar el problema; la mayoría son sencillos y pueden resolverlo rápidamente. No tiene sentido reinstalar Windows ni comprar altavoces nuevos todavía, ¿verdad? Esta guía te mostrará las soluciones más comunes, con consejos prácticos y comandos que puedes probar para recuperar el sonido sin desesperarte.
1. Comprobar si el audio estaba silenciado
Puede sonar tonto, pero a veces las cosas más simples nos juegan una mala pasada, como pulsar la tecla equivocada o el botón de silencio. Para asegurarte, reproduce cualquier audio o vídeo y luego pulsa el botón de silencio de tu teclado o haz clic en el icono del altavoz en la bandeja del sistema (esquina inferior derecha).Si el icono muestra un altavoz tachado, al hacer clic en él se activará el sonido. Además, en algunos portátiles hay un botón específico para silenciar que podrías haber pulsado accidentalmente. Comprueba esto primero, ya que es la solución más sencilla. Al activar el sonido, suele ser obvio si los altavoces estaban silenciados, pero en algunos casos esto falla a la primera; entonces tendrás que reiniciar o volver a activarlo.
2. Comprueba si los altavoces están conectados correctamente al ordenador.
Parece obvio, pero los cables se resbalan o se conectan al puerto equivocado, sobre todo al cambiar entre auriculares, altavoces externos o diferentes tomas de audio. Asegúrate de que el conector de 3, 5 mm esté completamente enchufado al puerto de audio (normalmente verde), no al del micrófono ni a otro puerto. Si usas altavoces o auriculares USB, comprueba que estén bien conectados y que Windows los reconozca. Si usas un ordenador de sobremesa con altavoces integrados, revisa también la conexión; a veces, el conector trasero puede estar suelto o mal insertado. Windows a veces cambia de dispositivo por defecto tras las actualizaciones o desconexiones, así que conviene asegurarse de que se selecciona el dispositivo correcto más adelante. Si usas un portátil con los altavoces integrados, omite este paso, pero verifica el dispositivo de salida en la configuración.
3. Uso del solucionador de problemas de audio
Esta es una práctica herramienta integrada que puede detectar problemas comunes automáticamente. Para acceder a ella, escribe Solucionar problemas en el cuadro de búsqueda del menú Inicio. Luego, haz clic en Configuración de solución de problemas. Desplázate hacia abajo o busca Reproducción de audio en Buscar y corregir otros problemas. Haz clic en Ejecutar el solucionador de problemas. Te hará algunas preguntas y luego comenzará a analizar el sistema; a veces encuentra algo simple como un dispositivo deshabilitado o un problema con un controlador. En algunos equipos, puede que necesites ejecutarlo varias veces, pero vale la pena intentarlo; en la mayoría de los casos, corrige algún problema menor que afecta el sonido. Ten paciencia y sigue las instrucciones; es posible que te pida que apliques las correcciones o que reinicies el equipo.
4. Reinstalar o revertir los controladores
Los controladores pueden dañarse o quedar obsoletos tras las actualizaciones. Si el solucionador de problemas no funcionó, intente reinstalar el controlador de audio mediante el Administrador de dispositivos. Abra el Win + XAdministrador de dispositivos. Expanda Controladoras de sonido, vídeo y juegos. Haga clic con el botón derecho en su dispositivo de sonido (por ejemplo, “Realtek High Definition Audio”) y seleccione Desinstalar dispositivo. Confirme y reinicie el equipo; Windows debería reinstalar automáticamente los controladores al reiniciar. En ocasiones, puede ser útil visitar el sitio web del fabricante (como Realtek o el fabricante de su portátil) y descargar el controlador más reciente si la versión de Windows presenta errores.
5. Actualizar el controlador de audio
Si aún no escuchas nada, actualizar los controladores es una buena opción. En el Administrador de dispositivos, haz clic derecho en tu dispositivo de audio y selecciona Actualizar controlador. Elige la opción Buscar automáticamente software de controlador actualizado. Si Windows encuentra una versión más reciente, instálala. De lo contrario, visita el sitio web de soporte del fabricante de tu PC o placa base, descarga el controlador más reciente e instálalo manualmente; esto suele resolver errores que causan problemas de sonido, especialmente después de las actualizaciones de Windows. En algunos casos, actualizar los controladores puede solucionar problemas como la falta de sonido al reactivar el equipo tras la suspensión.
6. Configurar el dispositivo de reproducción predeterminado correcto
A veces, Windows cambia los dispositivos de audio predeterminados tras las actualizaciones o los reinicios; esto significa que, aunque tengas los altavoces conectados, Windows no les envía sonido. Para solucionarlo, haz clic con el botón derecho en el icono del altavoz en la bandeja del sistema y selecciona «Abrir configuración de sonido».Ve a la sección «Salida» y comprueba que esté seleccionado el dispositivo correcto (tus altavoces o auriculares).Para un mayor control, haz clic en «Panel de control de sonido» en la parte derecha y, en la pestaña «Reproducción», haz clic con el botón derecho en tu dispositivo de sonido y elige «Establecer como dispositivo predeterminado».Haz clic en «Aceptar» y reinicia el equipo para ver si se ha solucionado el problema del sonido.
7. Cambiar el formato de audio
Aunque no es lo primero que se suele probar, a algunos usuarios les ha ayudado a solucionar extraños problemas de sonido. Para ello, haz clic derecho en el icono del altavoz, selecciona Sonido y luego ve a la pestaña Reproducción. Haz doble clic en tu dispositivo predeterminado y ve a la pestaña Avanzado. Aquí verás el menú desplegable Formato predeterminado; prueba con diferentes frecuencias de muestreo o profundidades de bits. A veces, configurarlo a algo como 24 bits, 44100 Hz (calidad de estudio) marca la diferencia. Experimenta un poco con los formatos y comprueba si el sonido funciona mejor. Aunque parezca extraño, cambiar estos ajustes ha solucionado algunos problemas de reproducción para algunos usuarios.
Resumen
- Comprueba si tu audio está silenciado o si se ha desactivado accidentalmente mediante una tecla de acceso rápido.
- Comprueba que tus altavoces estén conectados correctamente y que el sistema los reconozca.
- Ejecuta el solucionador de problemas integrado de Windows para obtener soluciones rápidas.
- Reinstale o actualice sus controladores de audio a través del Administrador de dispositivos o del sitio web del fabricante.
- Asegúrate de que Windows esté enviando el sonido al dispositivo correcto.
- Si los métodos habituales no funcionan, prueba a cambiar el formato de audio.
- A veces, un reinicio rápido después de actualizar los controladores soluciona el problema.
Resumen
Al final, suele ser una combinación de revisar cosas básicas y actualizar los controladores. No sé por qué, pero los controladores o la configuración del dispositivo suelen ser los culpables, incluso si parece un problema de hardware. Si nada de esto funciona, vale la pena probar con una tarjeta de sonido USB externa o revisar la configuración de la BIOS si tienes un ordenador montado por ti mismo. Crucemos los dedos para que esto nos acerque un poco más a solucionar esos molestos problemas con los altavoces. A mí me funcionó; espero que a ti también.